jueves, 26 de mayo de 2011

Juegos de toda la vida. Juegos con nombre y apellido.

- Dejame que te cuente que yo ya estuve allí, y que tú tambien estarás, todos pasamos por ahí alguna vez en nuestra vida. Pasamos, deseamos volver y nunca lo hacemos, porque amigo, eso son cosas del azar y el azar nunca juega dos veces la misma carta, es más, dudo que juege dos veces al mismo juego. Y, tragedia, nosotros no cambiamos, continuamos inexpertos en un juego que nos lleva la vida y las ganas, el tiempo. Aprendemos la ténica, los recursos, las trampas, pero no todo es teoria y sin duda, amiga, sin duda, jamás aprendemos a jugar. Llegará un día en el que te plantees cambiar de juego pero 'son muchos años' pensarás y al final del día los años de técnica te borraran la idea de la cabeza. Recuerda, aprende a jugar.
- Y ahora, dime, ¿a qué juegas tú?
- Al juego de todo el mundo, al 'aquí te pillo, aquí te mato'.
- Lástima, yo sólo busco un compañero de mus.
- Sí, una verdadera lástima.


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lunes, 23 de mayo de 2011

Así es.

Me llaman la tonta del bote. Sólo que yo no recojo colillas para nadie ni nuca he sido empleada del Royal Manzanares.


03.14

En la mano encontré fuertemente apretado un mechero. Un clipper común, normal, mundano. No había rastros de sangre, ni tampoco sed de ella. Solo pisadas de unos grandes zapatos de payaso que se alejaban en dirección noroeste, con aparente prisa. La puerta no mostraba forcejeo alguno, supusimos con desconocida certeza que ella le conocía. Los fotógrafos tomaron instantáneas de la escena. La macabra escenificación de lo real. No pude evitar fijarme que a su derecha, en vilo se sostenían con quietud pétrea dos jarrones de cerámica suiza. Conté también tres docenas de cigarros, asfixiados contra el suelo. Probablemente por el golpe de verdugo a manos -o a pies- de unos zapatos de tacón, del 37 unas veces y otras del 38. Rojos.

Y allí estaba, fue mi compañero el que se percato de pequeño post-it amarillo que colgaba de la nevera. La pista definitiva que nos ayudaría a acabar con esta oleada criminal que azotaba con furia nuestra pequeña urbe.
'¡Qué desazón!' rezaba.
-Es definitivo -le dije- Otro claro caso de pérdida.
-Y ya van 12 este mes -dijo uno de ellos desde el otro lado.

Y por allí, por esa puerta, se fueron las ganas, el tiempo, las dobleces, los desvios de carril y el genio de todo ello. Por allí se fue el amor. Y nadie volvió a saber de él, pero tenemos indicios de que aún no ha abandonado la ciudad. Testigos cuentan que lo han visto en los bancos del parque alimentando a las palomas amputadas que han perdido la oportunidad para volar. No se preocupen, tarde o temprano, daremos con él.

domingo, 1 de mayo de 2011

Fobias.

Si bien como dice ahí arriba 'Un hombre con la camisa demasiado limpia no es honrado', ayer yo era una de las personas más honradas del Cantábrico.

Algo ocurrió ayer, debió ser una tormenta estilo 'Misfits' que en vez de conceder poderes volvió a la gente retrasada -aunque graciosa- y a mí me regaló ciertos conatos de violencia.

Estoy entre la misantropía -con sus claras excepciones- y la androfobia.
De momento he decidido no añadir más fobias a lo que a mi parecer es una no tan larga lista de fobias.
Veáse:
Iatrofobia
Una monofobia que va desapareciendo.
La siempre presente nostofobia.
¿Philofobia? Seguramente.
No podía faltar la coulrofobia.
Y una recien descubierta hypengyofobia.